martes, 27 de septiembre de 2011

Próximo paso de la estación espacial internacional (Argentina)

La ISS se desplaza cada día sobre nuestros cielos a una altura de unos 400 kilómetros. Su capacidad para reflejar la luz del sol hace posible que la podamos contemplar fácilmente. Su superficie mayormente acerada la convierte en el segundo objeto más brillante en la noche, después de la Luna y por delante de Venus. Para observarla de la mejor manera posible hay que seguir estos sencillos consejos:

  • La ISS debe estar iluminada por el sol, es decir, fuera del cono de sombra de la Tierra.
  • El sol debe estar a no menos de 10 grados bajo el horizonte o, en otras palabras, debe haberse puesto por lo menos 40 minutos antes o deben faltar más de 40 minutos para que salga.
  • En su paso, la ISS debe elevarse más de 5 grados sobre el horizonte. A menos de 5 grados no es visible por la distorsión que genera la atmósfera.

Santa Fe:
Córdoba :
Buenos Aires :
Referencias de las tablas:




 

  • Magnitud: es una medida del brillo de un objeto en el cielo. Es una medida logarítmica, cuánto más bajo es su valor más brillante es el objeto.
  • Altitud: es el ángulo de un cuerpo celesde medido hacia arriba desde el horizonte del observador. Un objeto en el horizonte tiene altitud 0º mientras que uno directamente sobre la cabeza del observador tiene 90º.
  • Azimuth: es la dirección del objeto celeste medido según el sentido de las manecillas del reloj desde el norte del horizonte del observador. Un objeto en el norte tiene azimuth 0º, en el este 90º, en el sur 180º y en el oeste 270º.
A menudo se usan letras para representar ángulos de azimuth en el siguiente orden:
N (0°), NNE (22.5°), NE (45°), ENE (67.5°), E (90°), ESE (112.5°), SE (135°), SSE (157.5°), S (180°), SSW (202.5°), SW (225°), WSW (247.5°), W (270°), WNW (292.5°), NW (315°), NNW (337.5°)


Fuente:

Estacionespacial.com

martes, 20 de septiembre de 2011

Los nombres de las estrellas

La mayoría de los textos de astronomía asignan el origen de los nombres de estrellas y constelaciones a los pueblos árabes, aunque por cierto los hay de procedencias diversas. Imaginar el extenso desierto, sin luces artificiales de ninguna naturaleza y a centenares de kilómetros de las aldeas o comunidades mas cercanas, debe recordar una sesión en el planetario, cuando el proyector muestra las estrellas en todo su esplendor y colorido, con la faja irregular de la Vía Láctea cruzando el silencioso firmamento.

Hace miles de años, la curiosidad del hombre por los astros les llevó a creer que aquellos marcaban decididamente sus destinos, naciendo entonces una oscura hermana de la Astronomía: la Astrología basada en la superstición del hombre, hecho que (vaya de paso) hasta nuestros días parece tener vigencia entre la mayoría de los pueblos de la Tierra.

No obstante, muchos de los nombres impuestos a las constelaciones y a las estrellas por aquellos antiguos observadores de espíritu sencillos y poéticos, son ciertamente bonitos y hasta fantásticos. Cada nombre dado a una estrella tiene su significado. Así por ejemplo, "Alphard", nombre de la estrella principal de la constelación de "Hidra", significa en lengua árabe: "la solitaria en la serpiente"; o también "Alnilam",una de las Tres Marías, en la misma lengua: "la sarta de perlas".

martes, 13 de septiembre de 2011

Los mares de la Luna

Nuestro satelite natural, la Luna, constituye un gran espectáculo cuando se lo observa por medio de un telescopio, aun si este es de pequeñas dimensiones. El célebre Galileo Galilei fue el primer hombre que lo vió a través de un instrumento de aumento a fines de 1609, dando cuenta de las irregularidades del paisaje lunar para la posteridad.

El primitivo telescopio de Galileo apenas poseía 30 aumentos pero ello le permitió visualizar el terreno escabroso de la Luna interrumpido abruptamente por regiones suaves.

Las manchas oscuras, las cadenas montañosas y los cráteres, forman en su conjunto la "faz lunar". El ilustre sabio italiano creyó que las regiones oscuras eran grandes mares. Los "mares" de la Luna son plenamente visibles en la fase de luna llena, cuando el Sol ilumina el disco homogéneamente. Desde luego, los mares son llanuras casi aplanadas. La Luna carece de agua y de aire, no obstante haber bautizado a algunas regiones con nombres tales como "Mar de las lluvias" (Mare Imbrium), o "Mar de las nubes", "Océano de las tormentas" (Oceanus Procellarun), etc. La parte más brillante o deslumbrante de la Luna está constituída por los denominados cráteres. La mejor forma de contemplar el variado paisaje lunar consiste en hacerlo en la fase de cuarto creciente, es decir, a partir del tercer día después de la Luna Nueva y hasta dos días antes de la Luna Llena; entonces el panorama que presenta el suelo del astro es fantástico.

Mapa de la Luna. Clic para ampliar.

martes, 6 de septiembre de 2011

La abundancia de las estrellas múltiples en el universo

Las estrellas dobles son muy numerosas. Hoy se estima que alrededor de un 30% de todas las estrellas visibles a simple vista sumado a un número muy elevado de estrellas telescópicas, son dobles o múltiples. De las estrellas brillantes del cielo, Sirio, Alfa Centauro, Proción Rigel, Altair y Betelgeuse son dobles; otras, como Capella, de la constelación de Auriga, es una estrella triple; en plena nebulosa de Orión está la célebre estrella séxtuple Theta de Orión. Muchos astrónomos opinan que la división de una masa primitiva de dos núcleos semejantes, para formar una estrella doble, es una consecuencia natural de un proceso evolutivo de las estrellas.

Gran número de estrellas dobles forman sistemas lo bastante rápidos para haber cumplido ya varias revoluciones en torno de un centro común, desde que fueron descubiertas como tales. Otras han trazado un pequeño arco de su curva, insuficiente para determinar la órbita completa, pero permitiendo afirmar la naturaleza orbital del movimiento que, en muchos casos, puede abarcar varios siglos. Finalmente, las componentes de ciertos pares de estrellas se mueven en línea recta, demostrando que no están asociadas físicamente y que solo se trata de un efecto de perspectiva.

  Estrella múltiple HO 72

viernes, 2 de septiembre de 2011

Apolo 11: Llegada a la Luna

Llegó finalmente el día esperado: 20 de julio. Los astronautas Armstrong y Aldrin pasaron al módulo lunar, quedando Collins en el módulo de mando. Se inició un descenso en un ángulo pronunciado, hacia la Luna. Mientras tanto Collins, solo frente al universo, giraba alrededor de una órbita de "aparcamiento" a 100 km de la superficie.

Mis compañeros y yo estábamos en la sala principal del control junto al VAB. A través de la tv nos hacíamos eco del momento de tensión que cundía entre los responsables de la misión.

La quietud y el silencio fueron totales cuando Armstrong dijo hallarse a 40 m sobre el suelo de Selene. Buscó el mejor lugar, para luego decidirse a descender en un punto relativamente liso. Minutos despúes anunció: "Aquí la Base de la Tranquilidad... el Águila ha alunizado...".

Allí estaban... 300 años de ciencia les habían abierto el camino a las estrellas. En Houston, en Cabo Kennedy, las sirenas sonaron largo tiempo. El momento no se puede describir con palabras. Nunca olvidaré los rostros de los padres de los astronautas. Por tv se los veía, al igual que a las esposas e hijos de los intrépidos viajeros. En ese momento recuerdo que observé a lo lejos la plataforma de lanzamiento... Todo había comenzado allí, a 5 km. El momento me pareció irreal por un instante...